Este delicioso postre el cual mi hija llevaba detrás de mi para que lo hiciese y por fin me decidí y aquí os muestro el resultado, mis tesoros me dicen que esta rico rico y fresquito aún más.
- 4 pastelitos (ver foto)
- 24 laminas de gelatina o 5 sobre de gelatina neutra
- 1 lata de leche evaporada
- 1 lata de leche condensada
- 200 ml de leche
- 1 cucharadita de azúcar vanillada o esencia de vainilla
- Aceite de girasol para pincelar el molde
En primer lugar guardamos los pastelitos en el congelador para que tengan consistencia dura en el momento de la preparación.
Hidratamos las hojas de gelatina en el agua fría
Llevamos al microondas por 1 minuto, o la ponemos al baño María para que la gelatina se haga líquida
Engrasamos el molde con la ayuda de una servilleta húmeda en aceite esto evitara que la gelatina se nos pegue al molde
Calentamos en un cazo la leche, la leche condensada, la leche evaporada y la vainilla, mezclamos bien moviendo continuamente hasta que este caliente sin dejar que llegue a hervir.
Apartamos del fuego y se lo agregamos a la gelatina liquida, mezclamos poco a poco hasta que se integre bien.
Echamos al molde una taza más o menos unos 200 ml y llevamos al frigorífico durante 30 minutos
Ya se ha cuajado
Sacamos los pastelitos del congelador y los abrimos
Los ponemos sobre la gelatina y agregamos más gelatina sin llegar a cubrir los pastelitos y volvemos a meter al frigorífico por otros 30 minutos
Ya cuajado
Cubrimos con el resto de gelatina y llevamos al frigorífico hasta el otro día
Ya tenemos la gelatina totalmente cuajada procedemos a desamoldar
Ya tenemos nuestra gelatina sorpresa lista
Mi catador dispuesto a catar esta delicia
El corte y la sorpresa
Tu trozo a que esperas!!
NOTA
También podemos utilizar estos pastelitos cubiertos de chocolate, a mi parecer creo que le aportaran un sabor muy rico.
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