TOCINO DE CIELO EN OLLA ERIKA SUPERIOR Y TRADICIONAL

El tocino de cielo es típico de mi tierra, Jerez de la Frontera, se utilizaban las 

claras de los huevos para clarificar el vino y por tanto había excedente de yemas,

 por ello se las daban a los conventos y las monjas inventaron este delicioso dulce, 

que por cierto está exquisito.

_ 250 gr. de azúcar
_ 250 ml de agua
_ 250 gr. de yemas de gallina o 5 yemas y 2 huevos
_ Caramelo liquido ( Si queréis hacerlo solo necesitáis 3 o 4 cucharadas 
de azúcar y unas gotas de limón)

NOTA

Las yemas las podéis encontrar en vuestra carnicería habitual, recovas, o casquerías de este modo no desperdiciamos tanta clara aunque las podemos congelar.

En primer lugar caramelizamos el molde que nos entre en nuestra cubeta

En un cazo a fuego medio ponemos el azúcar y el agua  y dejamos que 
hierva durante 15 minutos, cogerá un punto hebra.
Dejamos templar.

Aparte en un bol ponemos las yemitas que habremos pinchado con un 
cuchillo para que salgan bien, o las 5 yemas y los 2 huevos enteros,
 batimos un poco  y añadimos poco a poco a el almíbar y batimos.

Incorporamos la mezcla colada en el molde caramelizado

 Tapamos el molde, si no tiene tapadera propia tapamos con papel aluminio
 y una goma para que no se nos cuele el vapor

Metemos en la cubeta y echamos agua hasta mitad del molde

Cerramos nuestra olla y programamos 
MENÚ ERIKA----> CARNE   
GM D----> POLLO
20 MINUTOS VÁLVULA CERRADA Una vez que pite dejamos
en MENÚ MANTENIMIENTO DURANTE 25 MINUTOS MAS

Pasado el tiempo dejamos despresurizar y sacamos de la cubeta con cuidado 
de no quemarnos, quitamos la tapadera o papel aluminio y desamoldamos

 Y aquí tenemos el resultado un delicioso postre

 Otra manera de presentar 

EN HORNO 

Para hacerlo en horno seguiremos toda la preparación y meteremos 
al horno al baño María durante 45 minutos a 180º

TRUCO

Para que el tocino de cielo no se corte, es importante que el almíbar  no 
esté demasiado caliente cuando lo mezclamos con las yemas de huevo,
del mismo modo, el agua del baño María no debe llegar a hervir.